Hermes Pardini, la cadena de farmacia y centros de vacunación más grandes de Brasil, en alianza con los estudios de diseño VZLAB y Lobo, decidieron atender este inconveniente y así crearon el proyecto “VR Vaccine”.

Luiz Evandro, director de VZLAB y Lobo, explica:
 

“Lo que aprendimos al hacer este proyecto fue que los niños temen más a la aguja que al dolor en sí. Así que, si teóricamente pudiéramos eliminar el momento en que la aguja va acercándose hacia a ellos, entonces el miedo por la vacunación también desaparecería. Y al final, ¡es lo que ocurrió!”¹.

La estrategia para conseguirlo consiste en el uso de realidad virtual (RV) que, por medio de unos lentes de RV y un par de teléfonos inteligentes, transporta a los niños fuera del frío ambiente hospitalario y los sitúa en un mundo temático. El equipo de diseño creó una historia de RV de tres minutos en la que una princesa explica a los niños qué es una vacuna y la compara, a manera de analogía, con un escudo. Luego, les informa que están a punto de recibir ese escudo y que, una vez aplicado, los protegerá contra los villanos y, además, les permitirá ayudar a salvar el reino de la princesa². Mientras eso ocurre, el personal médico sigue de manera simultánea la historia a través de uno de los teléfonos inteligentes, el cual les indica el momento en que deben limpiar el área y aplicar la vacuna sincronizando sus acciones con la historia². La narración inmersiva no solo alivia el temor de los pequeños, también favorece la relajación de sus músculos, lo que facilita enormemente la aplicación de la inyección².

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El equipo implementó este proyecto en el mes de mayor incidencia de gripe y los resultados fueron tan buenos, que el número de vacunas programadas aumentó 13%. Debido al éxito obtenido, Hermes Pardini ha instalado el sistema en más de 80 centros de vacunación en todo Brasil.¹